Desde la derrota alemana en Stalingrado, los líderes aliados Churchill, Roosevelt y Stalin comenzaron a planear el mundo de la posguerra. Desde la visita del canciller soviético Molotov a Washington en 1942, la política de Roosevelt de cooperación entre Estados Unidos y la URSS para reorganizar el mundo sobre la base de la seguridad colectiva, bajo la protección de cuatro policías, (USA, URSS, Gran Bretaña y China) toma forma desplazando la alianza anglo-americana de la fase de guerra. Este viraje se hizo visible en la serie de conferencias de los tres líderes. La primera de ellas tuvo lugar en Teherán, entre el 28 de noviembre y el 1º de diciembre de 1943, y en ella se sellaron varios acuerdos: abrir un segundo frente en Francia en la primavera de 1944, desmilitarización de Alemania y división de su territorio en cuatro zonas de ocupación a cargo de los países vencedores. Roosevelt aprobó el plan de Stalin de mover las fronteras de Polonia hacia el oeste y accedió a la ocupación de las repúblicas bálticas por la URSS.
La siguiente conferencia se celebró en Yalta, en febrero de 1945. La URSS obtuvo el reconocimiento de sus fronteras occidentales de 1941 con todos los territorios adquiridos entre 1939 y 1941 entre los cuales se encontraban importantes porciones del territorio polaco. La frontera de Polonia en el oeste se fijó en el río Neisse aunque más tarde se descubrió que había dos ríos con el mismo nombre en Alemania. Roosevelt obtuvo de Stalin la promesa de realizar elecciones libres en los países ocupados por el ejército Rojo. También se llegó a un acuerdo sobre organización de las Naciones Unidas para la paz y la seguridad colectiva y hubo un acuerdo secreto sobre Manchuria.
La tercera conferencia se realizó en Postdam del 17 de julio al 2 de agosto de 1945. Roosevelt había muerto el 12 de abril y Harry Truman había asumido la presidencia. Churchill participó en las primeras sesiones pero tras la derrota electoral fue sustituido por el nuevo primer ministro Clement Attlee. Realizada tras la retirada de las fuerzas anglo-americanas, esta conferencia se enmarcó en el contexto de la consolidación de la ocupación de Europa oriental por las fuerzas militares soviéticas. Entre los temas de la agenda se encontraba el problema de las reparaciones que se impondrían a Alemania: Stalin reclamaba 20 mil millones de dólares pero se resolvió finalmente que cada país ocupante de Alemania extraería las reparaciones que reputara convenientes de su respectiva zona de ocupación. Los reclamos soviéticos de una base en el Bósforo (y subsiguiente control sobre los estrechos, una vieja aspiración de la Rusia zarista) y participación en las ex –colonias de Italia, fueron rechazadas. Se acordó un mecanismo cuatripartito para los problemas de la ocupación de Alemania. Stalin prometió ayuda en la guerra contra Japón pero eludió todas las presiones de Occidente sobre elecciones libres en los países ocupados.
En una conversación aparte de la conferencia, Truman le contó confidencialmente a Stalin que Estados Unidos ya poseía la bomba atómica y Stalin no pareció sorprenderse: en sus memorias (Year of Decisions) Truman sostiene que Stalin se limitó a expresar sus deseos de que Estados Unidos hiciera buen uso de ella contra los Japoneses. Los restantes temas de la agenda fueron transferidos a las reuniones de los ministros de relaciones exteriores quienes tuvieron una serie de encuentros en los siguientes 18 meses sin llegar a resultados concretos de relevancia.
Para ese momento era visible que el sistema de los cuatro policías ideado por Roosevelt era inviable, entre otras cosas porque China aparecía cada vez menos como un posible cuarto policía. El problema de Asia era tan dramático como el de Europa a la caída del Tercer Reich pero por factores diferentes: en primer lugar, el desarrollo de la revolución china, un proceso que se había iniciado en la década de 1920 y que en 1945 controlaba partes estratégicas del territorio. En 1949 la revolución encabezada por Mao Dze Dong triunfó y el régimen de Chiang Kai Shek se refugió en la isla de Formosa. Un nuevo país llamado República Popular China apareció firmemente instalado en el Asia como aliado de la URSS. En segundo lugar, los efectos del expansionismo de Japón antes y durante la segunda guerra mundial, sobre un amplio espacio territorial que se extendía desde las fronteras de Birmania hasta las Filipinas e Indonesia, dislocando las líneas de comunicación del Imperio británico entre la India y Australia y controlando el estratégico enclave del estado de Manchukuo, entre Siberia, China y Corea. Aunque los japoneses fueron detenidos en Nueva Guinea y Guadalcanal, la guerra en el Pacífico se extendió hasta septiembre de 1945. El plan de Roosevelt de comprometer a la URSS en la guerra fue abandonado por Truman y la bomba atómica terminó decidiendo la rendición incondicional de Japón.